Por Alek Boyd
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ACTUALIZADO 15/10/2021 - Juan Guaido, el presidente "interino" designado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos de Venezuela, está en un aprieto. También lo es su jefe / manejador, Leopoldo López. Las personas que afirmaron promover la democracia y adherirse a sus principios básicos sabrán que la legitimidad no es algo que el Departamento de Estado pueda conjurar y otorgar a otros. La legitimidad es algo que solo tienen los funcionarios elegidos democráticamente. ¿Cuándo fue la última vez que Juan Guaidó ganó unas elecciones? ¿Cuándo ganó, esa última elección, bajo qué sistema / autoridad fue elegido? ¿Qué hay de López?
Hay unas próximas elecciones en Venezuela el 21 de noviembre. El órgano de gobierno que organiza y supervisa el proceso (el Consejo Electoral de Venezuela o CNE) es, exactamente, el mismo que declaró a Guaidó y López como ganadores en el pasado. Guaidó y López ahora están impugnando la legitimidad de ese organismo, y alegando que las elecciones no son libres y justas en Venezuela ... Son los únicos que lo hacen, ya que participan unos 70.000 candidatos. Todos los partidos de la oposición han presentado candidatos. Incluso se postulan candidatos de Voluntad Popular, el propio partido de López. ¿Dónde deja eso a Guaidó y López?
Qué cambio tan notable es esto para Nicolás Maduro. Sin moverse ni un centímetro de su posición original, esquivó con éxito todo lo que la administración Trump le arrojó. No solo eludió las sanciones del Tesoro destinadas a derrocarlo, sino que su control es más firme que nunca gracias a Trump y un conjunto de políticas elaboradas al azar por altos funcionarios estadounidenses completamente fuera de su alcance. Ni siquiera en el clímax de la historia de amor de Trump con Guaidó se persuadió a sus compañeros de viaje para que promulgaran medidas duras contra Maduro. Europa, como bloque, apenas hizo nada. Los países europeos, individualmente, hicieron aún menos, y España se llevó el premio de la mejor amiga de Maduro.
La magnitud del fiasco es tan monumental, tan inevitable, que la Unión Europea envía, por primera vez desde 2006, un equipo de observación electoral para validar las próximas elecciones. Ah, y el Centro Carter, gravemente quemado durante su último período, también está de vuelta en juego. La última vez que estuvieron los europeos, su equipo de observación electoral declaró :
El sistema de votación electrónica venezolana fue desarrollado por Smartmatic quien estuvo a cargo de toda la programación de las VM y el desarrollo del software del Centro de Agregación de Resultados. Sin embargo, el CNE posee el código fuente de todo el software Smartmatic que utiliza . Un equipo de TI de la CNE auditó completamente el código fuente, tanto para verificar la funcionalidad como para identificar áreas que necesitan mejoras o rediseños. Las solicitudes de rediseño por parte del CNE incluyeron métodos mejorados de aleatorización para ocultar la secuencia de los votos almacenados y la necesidad de confirmación al emitir boletas en blanco. En el futuro, la CNE planea hacerse cargo de todo el trabajo de desarrollo de software de Smartmatic. Después de eso, Smartmatic solo se encargará de la logística y el servicio y el montaje del hardware.Si bien los códigos fuente son propiedad de la CNE, por razones comerciales no están disponibles para el escrutinio público y no se han realizado auditorías independientes de terceros en ninguna parte del sistema de votación electrónica ”. [negrita agregada]
¿Ha cambiado eso de alguna manera? No, no lo ha hecho, por lo tanto Guaidó y López podrían tener razón. Sin embargo, su "justicia" es hueca. Hipócrita. No se basa en principios, sino en un deseo ardiente de seguir siendo relevante en un establecimiento político que los rechaza. Maduro, alguien representado como estúpido casi universalmente en los sectores de la oposición, ha superado a todos ellos. Una y otra vez. Después de todos los golpes de pecho del " Cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres ", lo único que queda en este patético espectáculo de capitulación generalizada es ir a besar el anillo. La flexión de la rodilla ya sucedió, cuando decenas de miles de candidatos presentaron sus candidaturas al CNE.
Sin embargo, la postura aislada de Guaidó y López es solo una parte del problema venezolano del Departamento de Estado. Para mantenerlos en juego, la administración Biden tendrá que hacer algo verdaderamente extraordinario en términos políticos, y eso es, de alguna manera, renovar / extender la "presidencia" interina a pesar de: 1) la falta de legitimidad democrática de Guaidó y, quizás incluso más lo que es más importante, 2) la falta de predominio de Guaidó sobre el establecimiento opositor de Venezuela. Es una situación imposible, acertadamente descrita por un funcionario europeo que comentó recientemente que Guaidó y López ya ni siquiera representan a su propio partido.
Más allá de la política, Joe Biden tiene otro problema. La cola de acreedores con reclamos legítimos contra Venezuela recorre varias veces el edificio del Tesoro. No puede mantener el protectorado de Trump de los activos venezolanos para siempre, especialmente cuando dichos activos, principalmente CITGO, están bajo el control de Guaidó / López. El Departamento de Justicia está destinado a investigar las actividades de CITGO desde que la gente de Guaidó asumió el control. Es casi seguro que cuando los acuerdos con Mercuria, por ejemplo, se someten a una lupa, no será la gente de CITGO y la gente de Mercuria la que realice transacciones perfectamente legítimas entre empresas. Aparecerán intermediarios. Aparecerán agentes. Es decir, aparecerán los procedimientos normales (para Venezuela). Entonces, ¿cómo explicará Guaidó? Porque él está, todavía, para explicar la corrupción que rodea a sus colaboradores más cercanos en Colombia,
Maduro, por otro lado, no podría importarle menos los activos más allá de las fronteras venezolanas. El chavismo asumió esa pérdida en el momento en que comenzó a nacionalizar, expropiar, triturar contratos y emitir deuda como si no hubiera un mañana, sin embargo, para Guaido & co es lo mejor: nunca lo han tenido tan bien, administrando activos similares a CITGO sin forma de responsabilidad.
La posición de Biden es aún más insostenible bajo un ámbito legal. Ningún tribunal independiente en Estados Unidos debería rechazar los derechos y fallos de los inversores bajo alguna política oscura, indefinida y mal implementada del Departamento de Estado de proteger los activos, de modo que Guaidó pueda pretender ser presidente. La separación de poderes es otro pilar sobre el que se construye la democracia, y se nos dice que la democracia de Estados Unidos es tan sólida que se exporta.
Guaidó ha fracasado, absolutamente, en presentar una defensa medio coherente de los activos venezolanos en el exterior. Nadie sabe qué pasa con Monómeros. En el caso de Nynas, el equipo de defensa de Guaidó aún no ha hecho una aparición significativa. En el caso de CITGO, la persona encargada de defenderse -en nombre de Guaidó- de las acciones legales de Crystallex y la persona que Crystallex contrató para brindar opinión pericial sobre por qué los tribunales deberían fallar a su favor es la misma: José Ignacio Hernández. Crystallex está al frente de esa fila de acreedores y está tratando de cobrar una indemnización de 1.200 millones de dólares contra CITGO. Ni siquiera un guaidoista completamente trastornado podría perderse el conflicto de Hernández, pero aun así, fue nombrado de todos modos, fue a discutir en ambos sentidos y, como era de esperar, se rió fuera de la corte.
Por desgracia, eso resume la posición de Estados Unidos sobre Venezuela: no se puede tener las dos cosas. O Guaidó es el presidente reconocido o no lo es. No puede ser "declarado" por el Departamento de Estado, cuando el movimiento de oposición que debe liderar y representar da un giro de 180 grados y corre para sentarse en el regazo de Maduro.
Si bien el mundo sigue "asombrado" por las revelaciones de los #PandoraPapers, para los observadores experimentados hay muy pocas cosas nuevas o innovadoras hasta ahora. Dentro del contexto de la liga de corrupción de Venezuela, el WSJ llegó con algo realmente nuevo el otro día: la SEC y el FBI están investigando a Morgan Stanley e Interactive Brokers, por los servicios prestados a Luis Mariano Rodríguez Cabello, mano derecha de Diego Salazar, primo hermano de Rafael. Ramírez, a su vez exdirector general de PDVSA y ministro de Energía de Venezuela. Sin embargo, Ramírez, inexplicablemente, aún no ha sido acusado por el Departamento de Justicia, a pesar de que jugó un papel decisivo en la aprobación de casi todos los grandes esquemas de corrupción que se están llevando a cabo actualmente .
Luego, está el co-conspirador no. 2 en un caso de lavado de dinero de $ 1.2 mil millones en el que el Departamento de Justicia está trabajando. Ese será Alejandro Betancourt: socio del ya imputado Francisco Convit; y del ya imputado Nervis Villalobos; y del ya imputado Javier Alvarado; y del ya sancionado Francisco D'Agostino; y del ya imputado * y * sancionado por el Tesoro Raúl Gorrin; y de Gazprombank Latinamerica Ventures, ya sancionado por el Tesoro; sin embargo, allí vive, en el regazo del lujo, entre Londres y Madrid, donde entretiene al padre y al hermano de Guaidó, y está "ayudando" a la causa de la "democracia" que la administración Trump intentaba en Venezuela a través de Guaidó y López.
Es, sencillamente, una posición insostenible. Cuando la oposición gane algunas gobernaciones, ayuntamientos y concejales en Venezuela, lo que harán, no se volverán contra Maduro, no se postularán para declarar a Guaidó como el Líder Supremo.quién va a dictar todas sus acciones. Las elecciones serán validadas por la UE y el Centro Carter. Todavía hay bastante dinero por hacer jugando bien con Maduro, ya sea que los estadounidenses quieran participar o no, pero lo que es más importante, una vez que ocurran estas elecciones y se declaren los ganadores, asumirán el cargo y continuarán con el trabajo de gobernante. En la carrera presidencial de 2024, nadie va a cuestionar si Maduro es legítimo o puede postularse para otro mandato. Más claro aún, con su participación, 70.000 candidatos están a punto de otorgar el único sello válido de legitimidad que necesita la "democracia" de Maduro.
Nadie podrá cuestionar eso después, ni siquiera los descendientes directos del Libertador que no tuvo hijos. López, quien recientemente dijo que los venezolanos necesitaban apoyo internacional para deshacerse de Maduro, se perdió una parte importante de esa declaración: Venezuela sí tuvo apoyo internacional, 54 naciones vinieron al rescate, por primera vez desde que el chavismo llegó al poder. Reconocido, el Departamento de Estado DID declaró su agrado por López, y todo eso fue dilapidado por el mismo hombre, con sus asociaciones con Raúl Gorrín, Maikel Moreno, Alejandro Betancourt y Vladimir Padrino.
ACTUALIZACIÓN 15/10/2021:
Como se mencionó anteriormente, la última vez que la Unión Europea envió una misión de observación electoral (EUEOM) a Venezuela, se estableció que nunca se había realizado una auditoría significativa sobre el sistema electoral de Venezuela, ya que su autoridad (CNE) "... posee el código fuente de todo el software Smartmatic que utilizan ... Si bien los códigos fuente son propiedad de la CNE, por razones comerciales no están disponibles para el escrutinio público y no se han realizado auditorías independientes de terceros en ninguna parte del sistema de votación electrónica ".
La EUEOM está de vuelta en la ciudad. En esta ocasión, un informe preliminar (ver pdf a continuación) establece, entre otras cosas, que " en este momento no se cumplen las condiciones mínimas para la observación electoral ". Más allá de la censura, la inexistente separación de poderes o el estado de derecho, la clara posibilidad de que los miembros de la EUEOM estén constantemente bajo vigilancia estatal, el informe afirma:
"El ExM opina que el despliegue de una MOE UE probablemente tendrá un impacto adverso en la reputación y credibilidad de las MOE UE y legitimará indirectamente el proceso electoral de Venezuela".
Tienen toda la razón, pues tal misión solo le servirá a Nicolás Maduro.
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