Por Daniel Coronell | Opinión
El Reporte Coronell | La W Radio
Noviembre 25, 2021
Dos colombianos son dueños de apartamentos en el edificio más caro de España.
La historia arrancó con una noticia en el mundo de la finca raíz: Hace unas cuantas semanas en España se rompió el record del precio más alto por metro cuadrado en un apartamento, un piso como se dice en Madrid.
Alguien pagó 18.000 euros por metro cuadrado en un ático en el barrio de Salamanca. El costo total del apartamento fue de 14 millones de euros. La cifra en pesos colombianos estaría cerca a los 70 mil millones de pesos.
Como es natural el edificio que alberga la lujosa propiedad se volvió noticia. Se llama Lagasca 99 y queda sobre la llamada milla de oro en el céntrico barrio de Salamanca en la capital española.
En la azotea tiene una preciosa piscina elevada en forma de ele y otra cubierta en el sótano para usarla en los meses fríos. Está hecho de cristal y desde sus magníficos ventanales se puede ver la Sierra Norte de Madrid, así como el Paseo de la Castellana, la Gran Vía y la Cibeles.
El vestíbulo de entrada mide 650 metros cuadrados y se precia de ser el más grande de España. Lagasca 99 tiene solo 44 apartamentos y el más barato cuesta 3 millones de euros.
La torre de los millones terminó llamando la atención de la prensa y la nota pronto saltó de las páginas de finca raíz a las de información económica y judicial.
El diario El País de España publicó un artículo titulado “Anatomía de Lagasca 99: ricos latinoamericanos, sociedades opacas y el alquiler más caro de Madrid”.
La nota reseña que el edificio, al que califica como el más exclusivo de la ciudad, tiene entre sus 44 propietarios a once mexicanos, cinco venezolanos y dos colombianos. ( https://elpais.com/espana/madrid/2021-10-22/anatomia-de-lagasca-99-ricos-latinoamericanos-sociedades-opacas-y-el-alquiler-mas-caro-de-madrid.html )
De acuerdo con la investigación de El País, la mitad de las propiedades está a nombre de compañías off shore muy convenientes para ocultar la identidad de sus dueños.
Tres de los cinco venezolanos son empresarios que se han enriquecido a la sombra de los gobiernos de Chávez y Maduro. Algunos les dicen boliburgueses otros enchufados.
Citan como ejemplo a Luis Otero Cervela, accionista de una empresa relacionada con el fraude al fondo de pensiones de la petrolera venezolana PDVSA. Así como a Tomás Niembro, el hombre de confianza de Víctor Vargas, el banquero de Chávez.
De los dos colombianos solo identifican a uno. Se trata del banquero Jaime Gilinski tan mencionado en estos días por la operación de toma hostil de Nutresa, la compañía de alimentos más importante de Colombia.
El señor Gilinski padre, a quien el artículo define como el segundo hombre más rico de Colombia, pudo ser identificado como propietario gracias a otra investigación: La de Pandora Papers.
En diciembre de 2018 compró el apartamento a través de una sociedad panameña llamada Colden Investments. En los registros públicos no aparece el nombre de Jaime Gilinski, solo en los documentos de la firma de abogados Alemán Cordero y Galindo, cuyos archivos hacen parte de la investigación periodística de Pandora Papers. (https://elpais.com/pandora-papers/2021-10-07/de-panama-hasta-puerto-banus-asi-compran-los-ricos-en-espana-casas-con-una-offshore.html )
El otro colombiano dueño en el lujoso edificio no está identificado en el artículo de El País.
Quizás por eso algunos se imaginaron que era fulano o zutano siempre creyendo que se trataba de alguno de los miembros de la corta lista de billonarios colombianos.
De acuerdo con la investigación de El País, la mitad de las propiedades está a nombre de compañías off shore muy convenientes para ocultar la identidad de sus dueños.
Tres de los cinco venezolanos son empresarios que se han enriquecido a la sombra de los gobiernos de Chávez y Maduro. Algunos les dicen boliburgueses otros enchufados.
Citan como ejemplo a Luis Otero Cervela, accionista de una empresa relacionada con el fraude al fondo de pensiones de la petrolera venezolana PDVSA. Así como a Tomás Niembro, el hombre de confianza de Víctor Vargas, el banquero de Chávez.
De los dos colombianos solo identifican a uno. Se trata del banquero Jaime Gilinski tan mencionado en estos días por la operación de toma hostil de Nutresa, la compañía de alimentos más importante de Colombia.
El señor Gilinski padre, a quien el artículo define como el segundo hombre más rico de Colombia, pudo ser identificado como propietario gracias a otra investigación: La de Pandora Papers.
En diciembre de 2018 compró el apartamento a través de una sociedad panameña llamada Colden Investments. En los registros públicos no aparece el nombre de Jaime Gilinski, solo en los documentos de la firma de abogados Alemán Cordero y Galindo, cuyos archivos hacen parte de la investigación periodística de Pandora Papers. (https://elpais.com/pandora-papers/2021-10-07/de-panama-hasta-puerto-banus-asi-compran-los-ricos-en-espana-casas-con-una-offshore.html )
El otro colombiano dueño en el lujoso edificio no está identificado en el artículo de El País.
Quizás por eso algunos se imaginaron que era fulano o zutano siempre creyendo que se trataba de alguno de los miembros de la corta lista de billonarios colombianos.
Pero no, el Reporte Coronell pudo establecer la identidad del otro colombiano propietario en el célebre edificio Lagasca 99. Poca gente lo ha oído mencionar, es casi un total desconocido.
Su multimillonario apartamento fue comprado a través de una empresa llamada Cme Ecoproyectos y Desarrollos. Una compañía registrada en España y cuyo objeto es producir energía eléctrica.
No encontré ninguna evidencia de que CME Ecoproyectos le haya vendido energía a nadie. La dirección que entrega para notificaciones es Lagasca 99, la misma del suntuoso apartamento de Madrid.
El hombre detrás de la firma dueña del apartamento se llama Orlando Cabeza Peñaranda.
Según algunos registros de prensa, es piloto y habría fundado una empresa de aviación privada llamada Aeroregional que después se cambió el nombre a Helistar.
Su hermano Milton Cabeza es -valga la redundancia- la cabeza visible de Helistar, empresa de vuelos charter que ha tenido entre sus clientes a Alex Saab, recientemente extraditado a Estados Unidos; a la exsenadora Piedad Córdoba y al abogado Abelardo de la Espriella quien ha sido apoderado tanto de Saab como de Helistar,
Nadie pone en duda que los apartamentos en Lagasca 99 son carísimos, pero exclusivos, exclusivos, lo que se dice exclusivos, pues quién sabe.
La información sobre la presencia de dos colombianos como dueños de apartamentos en el edificio más caro de España ha suscitado comentarios en las redes como este:
La Gaceta hace referencia a los apartamentos más caros en Europa en la zona de Salamanca en Madrid. Dos colombianos tienen apartamentos allí: Gilinsky y un socio de Alex Saab, el exsargento Orlando Cabeza, mismo de un negociado de los carros de basura en Colombia, dueño a su vez, junto con su hermano Milton, del Aerotaxi Heliestar, que tanto contrata con las Fuerzas Militares (FFMM) y Ecopetrol
La misma empresa que en Colombia no quiere pagar el IVA, para registrar la propiedad de sus aeronaves a nombre de su casa matriz panameña.
En Colombia no pagan impuestos a la Nación, pero sí pueden comprar un apartamento de 3 millones de euros o 70.000 millones de pesos.
Esas aberrantes prácticas son una constante en empresarios de la aviación en Colombia.
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