Por Lola Solís
El pasado 8 de enero de 2024, José Gaspard Morell fue detenido en el aeropuerto de Tocumen, en Panamá, cuando intentaba viajar a México con un pasaporte español. La detención se debió a una notificación roja de Interpol solicitada por Venezuela, donde se le reclama por haber defraudado a inversores venezolanos.
Sin embargo, su arresto no duró mucho. Sus abogados lograron sacarlo del aeropuerto mediante procedimientos irregulares, sin el conocimiento de la directora de Migración, quien se sintió burlada en su autoridad y funciones, y pidió una consulta legal al procurador. José Gaspard Morell fue llevado ante el fiscal de Asuntos Internacionales, y luego ante un tribunal panameño, para determinar si procedía o no una fianza y el inicio del proceso de extradición a Venezuela.
En una audiencia, una jueza le preguntó por qué había usado un pasaporte español, si su cédula panameña indicaba que era venezolano. Él le respondió, sin ningún pudor, que había renunciado a la nacionalidad venezolana y que pronto se haría panameño. Ambas afirmaciones eran falsas y violatorias de las leyes migratorias de España y Panamá, respectivamente. Con ello, José Gaspard Morell incurrió en perjurio y actuó de forma ilícita.
Además, declaró que usaba el pasaporte español para entrar a Venezuela por la frontera colombiana, como si fuera un ciudadano español, porque según él, la situación allí era muy peligrosa. Mientras decía estas cosas, se reía con sarcasmo y descaro, tratando de burlarse de la inteligencia de la jueza, quien le preguntó qué tenía de gracioso y cuál era el motivo de su risa. Finalmente, la jueza lo liberó bajo fianza, a pesar de su actitud irrespetuosa y desafiante, según relataron fuentes judiciales.
Una una venta fraudulenta
La razón por la que Venezuela solicita la extradición de los hermanos Gaspard Morell es porque son los responsables de una estafa millonaria a inversores venezolanos, mediante la empresa Industrias JG Induven y otras compañías.
Los hermanos vendieron el 100% de las acciones de una de sus empresas por 3.5 millones de dólares, sin cumplir con el traspaso acordado. Los compradores se dieron cuenta de que la empresa era una fachada, y que los hermanos se habían apropiado del dinero sin entregar nada a cambio. Los afectados denunciaron el caso ante la Fiscalía del Ministerio Público de Venezuela, que inició un proceso penal contra los Gaspard Morell.
Ante esta situación, el Órgano Judicial de Venezuela solicitó a la Interpol la colaboración para localizar y detener a los prófugos con fines de extradición. La Interpol emitió la notificación de alerta roja No. A-12081 de diciembre de 2023, contra los hermanos José y Chamel Gaspard Morell, por los delitos de estafa agravada y asociación ilícita para delinquir.
Otros procesos judiciales y campañas de imagen
Panamá y Venezuela no son los únicos países donde los hermanos Gaspard Morell tienen problemas con la justicia. También enfrentan procesos judiciales en Estados Unidos y España, por estafa y fraude.
En Estados Unidos, la cadena minorista de ferretería y mejoras del hogar The Home Depot los demandó por haber usado indebidamente, en uno de sus negocios en Venezuela, el nombre y la marca de la empresa, sin contar con una licencia para ello. La cadena minorista ganó el juicio y los hermanos fueron condenados a pagar 10 millones de dólares en compensaciones, por haber cometido fraude con la marca y el nombre de The Home Depot. Sin embargo, la cadena nunca pudo cobrar el dinero de la sentencia, pues los hermanos evadieron el pago.
Para tratar de limpiar su imagen, los hermanos Gaspard Morell han desarrollado una campaña en internet, donde se presentan falsamente como prominentes empresarios, impulsores del desarrollo económico en el oriente venezolano, con el propósito de ocultar los delitos de los que son acusados. Sin embargo, esta estrategia no ha logrado convencer a nadie, pues las evidencias de sus fraudes y mentiras son abrumadoras.
Persecución y acoso a docentes en Venezuela
Los hermanos Gaspard Morell no solo han cometido delitos económicos, sino también han ejercido violencia y hostigamiento contra personas inocentes en Venezuela. Uno de los casos más emblemáticos fue el que protagonizaron contra unas docentes del colegio privado Juan Jacobo Rausseau, ubicado en la ciudad de Puerto La Cruz, estado Anzoátegui.
Los Gaspard, aprovechándose de sus contactos en el poder, intentaron encarcelar a las educadoras y despojarlas de la dirección de la institución. Las acosaron con el objetivo de quitarles sus responsabilidades en la dirección del centro educativo, poniéndolas en riesgo de ir a prisión. En esta persecución contaron con el apoyo del abogado José Manuel Olleros Castro, quien es ahora también uno de los acusados como cómplices de los Gaspard en sus estafas a inversores.
Negocios sospechosos con empresas estatales
Los hermanos Gaspard Morell también realizaron negocios turbios con empresas estatales de venta de alimentos, creadas por el fallecido presidente Hugo Chávez. Se trata de Mercal y Pdval, dos entidades que han sido señaladas por casos de corrupción, desvío de fondos y malversación de recursos públicos.
Los hermanos Gaspard Morell se beneficiaron de contratos con estas empresas, sin cumplir con los requisitos legales ni ofrecer garantías de calidad. Se desconoce el monto exacto de los negocios que hicieron con Mercal y Pdval, pero se presume que fueron millonarios y en detrimento del erario público venezolano.
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