Un entramado de viejas amistades y relaciones personales cercanas a Begoña Gómez, consorte del jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, habría encontrado refugio en cargos y nombramientos estratégicos gracias, supuestamente, al peso político de Gómez en las altas esferas gubernamentales. Las sombras del supuesto tráfico de influencias y el flagrante nepotismo se ciernen sobre la residencia presidencial de La Moncloa.
No solo se le atribuye a Gómez haber mediado en beneficio de contactos cercanos en encuentros con intermediarios de negocios, como los vinculados a la firma Globalia, sino también de involucrarse directamente en la colocación de personas de su entorno en posiciones clave dentro de la administración.
Lazos de antaño reaparecen en la esfera pública
Según revelan diversas fuentes, Begoña Gómez habría ejercido su influencia para colocar en puestos relevantes a caras conocidas de su entorno más próximo. Una de las presuntas beneficiarias sería Lourdes Solís Toledo, amiga íntima de la esposa del presidente durante su juventud en Pozuelo de Alarcón. "Begoña se codeaba con ella frecuentemente, hacían celebraciones juntas y se rodeaban del mismo entorno de amigos en la adolescencia", afirman testimonios, según un reporte de Vito Quiles en EDATV.
El nexo entre ambas mujeres se remonta a varias décadas atrás, cuando compartían largas veladas en los bares de la localidad madrileña y disfrutaban de una estrecha camaradería. Esta sólida amistad habría sido determinante para que Solís Toledo obtuviera, presuntamente gracias a la intervención de Gómez, un puesto como candidata socialista en Torrelodones, en las elecciones municipales de 2019.
El círculo íntimo de Begoña Gómez: un sentimiento en común y viejas confidentes
Pero Lourdes Solís no es la única persona allegada a Gómez que habría sido beneficiada por sus presuntos manejos. Recientemente, se destapó que Javier Martorell, expareja sentimental de Begoña Gómez, fue colocado en el Consejo Superior de Deportes (CSD) apenas tres meses después de la investidura del líder socialista Pedro Sánchez.
En una curiosa vuelta de tuerca, Martorell contrajo matrimonio con la citada Lourdes Solís, años luego de su romance con Gómez, cerrando un triángulo de vínculos estrechos que habría confluido en la colocación de ambos en puestos de relevancia pública.
Sueldos generosos y ventajas para el círculo íntimo
La socialista Lourdes Solís, sin una trayectoria laboral significativa en el sector privado según sus perfiles públicos, ingresó en el PSOE de Torrelodones en noviembre de 2018. Desde entonces, ha percibido un salario cercano a los 40.000 euros anuales y ha disfrutado de las prerrogativas propias de la clase política municipal, todo ello aupada, supuestamente, por los hilos que la unen a Begoña Gómez.
Mientras, la relación entre la esposa del presidente del Gobierno y Solís Toledo no ha hecho más que estrecharse. La edil socialista ha utilizado sus redes sociales para elogiar efusivamente cada una de las actividades públicas de Gómez, en un ejercicio de aparente subordinación y agradecimiento por los supuestos favores recibidos.
Este presunto entramado de colocaciones y "enchufes" a dedo dentro del Partido Socialista contrasta abiertamente con las críticas vertidas desde la izquierda hacia la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, pues los partidos de la oposición han censurado airadamente las supuestas ventajas laborales que habría obtenido la pareja del líder popular por su vínculo sentimental con ella.
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