EL PUBLIQUE

EL PUBLIQUE

Rubén Villalba, agregado en la embajada española en Caracas, es suspendido tras ser detenido en España por su participación en la red de corrupción del "caso Koldo"


José Luis Ábalos, Koldo García Izaguirre

La investigación denominada 'caso Koldo' ha adquirido un nuevo matiz con la reciente suspensión de funciones que ha recaído sobre el comandante Rubén Villalba, quien fungía como agregado en la Embajada de España en Venezuela. Esta medida cautelar, implementada por la Guardia Civil tras su detención y posterior liberación por parte de la Audiencia Nacional española, forma parte de las repercusiones del citado caso y ha sido confirmada por fuentes del Instituto Armado.

El comandante bajo la lupa

Villalba, quien previamente fue parte de la estructura antiterrorista de los Servicios de Información de la Guardia Civil, está actualmente en la mira por presuntos delitos de cohecho y pertenencia a organización criminal. A raíz de estas acusaciones, el Juzgado Central número 2 de la Audiencia Nacional, bajo la dirección del juez Ismael Moreno, ha impuesto medidas restrictivas que incluyen la retención del pasaporte del comandante y la prohibición de dejar suelo español, truncando así su regreso a Venezuela.

El 'caso Koldo', que ha mantenido en vilo a la opinión pública, despliega una red de conexiones y diálogos que complican la situación de Villalba. Una conversación fechada el 19 de septiembre de 2023 entre Koldo García, exasesor de José Luis Ábalos en el Ministerio de Transportes, y Juan Carlos Cueto, presunto 'cerebro' de la organización, deja entrever el papel de un amigo "de los verdes" – argot para referirse a la Guardia Civil – en la apertura de "un par de puertas" en Venezuela.

El presunto entramado de corrupción no se detiene ahí. García, al parecer, acudió a un encuentro con un empresario venezolano y su amigo "de los verdes", donde salió a relucir una estafa y robo atribuidos a Víctor de Aldama, otro de los implicados en la trama. Este y otros elementos del sumario apuntan a un negocio turbio relacionado con la venta de mascarillas.

José Luis Rodríguez, subteniente de la Guardia Civil ya jubilado, también emerge como figura relevante en la investigación. Habría sido clave en la gestión de los contratos ahora cuestionados, facilitando el contacto entre Cueto y de Aldama.

Alertas previas y detención

El comandante Villalba, que recién había asumido el cargo de agregado de Interior en Venezuela este año, fue detenido el pasado lunes 4 de marzo. Se presume que alertó a la red liderada por Koldo García Izaguirre sobre las investigaciones en curso. El miércoles, tras su declaración ante el juez Moreno, se le concedió la libertad con restricciones territoriales.

Villalba, quien en 2017 enfrentó acusaciones de tortura y agresión sexual de una detenida, fue finalmente absuelto de esos cargos. Sin embargo, su pasado vuelve a la luz en medio de las actuales indagaciones.

El chivatazo y la sospecha

Un mensaje enviado por Koldo García a Rogelio Pujalte, otro investigado, el 3 de febrero – solo semanas antes de la operación de la Guardia Civil – sugiere un posible aviso previo sobre las investigaciones: "Que no se preocupe, lo sé todo". Este intercambio, así como otros seguimientos y pruebas recopilados, han fortalecido la hipótesis de una alerta interna.


José Luis Ábalos, Koldo García Izaguirre

La trama también saca a la luz la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, vinculada al subteniente Luis Rodríguez García y a Koldo García, que acaparó más de 52 millones de euros en contratos públicos durante el 2020 para la adquisición de material sanitario.

A medida que el 'caso Koldo' continúa desentrañándose, la Guardia Civil y la Audiencia Nacional prosiguen con una investigación que parece no tener fin, desenmascarando una serie de acciones y relaciones que sacuden los cimientos de la integridad institucional.

En el entramado de este caso, surge la figura de Koldo García Izaguirre, el asesor de confianza de José Luis Ábalos, quien mantuvo comunicaciones que apuntan a un conocimiento anticipado de las investigaciones. El mensaje enviado al empresario Rogelio Pujalte, otro de los implicados, revela un intento de calmar preocupaciones respecto a la seguridad de sus conversaciones, sugiriendo un conocimiento previo de las acciones de la Guardia Civil: "Que no se preocupe, lo sé todo". Este intercambio es interpretado por los investigadores como un aviso de que García estaba al tanto de que estaba siendo objeto de seguimiento.

Rogelio Pujalte

La red empresarial en cuestión

La empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, que recibió una suma considerable por contratos públicos en el año 2020, se encuentra bajo escrutinio por su conexión con los investigados. Luis Rodríguez García, subteniente de la Guardia Civil hasta su jubilación, figura como una pieza clave en este esquema al estar vinculado tanto con la empresa como con Koldo García.

Mientras la trama del 'caso Koldo' sigue desvelándose, con cada pieza del sumario aportando más luz sobre la red de corrupción, la Guardia Civil y la Audiencia Nacional continúan trabajando para aclarar todos los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes.

 La trama se extiende más allá de las fronteras españolas

El diario El Mundo ha destapado una nueva conexión que arroja luz sobre las intrincadas ramificaciones del 'caso Koldo'. Según las revelaciones, Rubén Villalba Carnerero, el comandante de la Guardia Civil detenido el pasado lunes 4 de marzo por su presunta implicación en este escándalo, estuvo presente en el aeropuerto de Barajas la madrugada del 20 de enero, la misma noche en la que la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, aterrizó en Madrid.

Este sorprendente hallazgo añade una nueva pieza al rompecabezas, elevando a cuatro el número de personas vinculadas a la trama investigada por la compra de mascarillas durante la pandemia que coincidieron en el aeródromo madrileño aquella fatídica noche. Además de Villalba, José Luis Ábalos, Koldo García y Víctor de Aldama también estuvieron presentes, según los informes.

Lo que resulta aún más intrigante es el hecho de que, antes de su arresto, Villalba se encontraba destinado en la Agregaduría de Interior de la Embajada de España en Venezuela. Un puesto privilegiado y altamente remunerado que, según fuentes consultadas, es "codiciadísimo" entre los mandos de las Fuerzas de Seguridad españolas.


Embajada de España en Venezuela

Cabe destacar que el comandante apenas llevaba unas semanas en el país caribeño, habiendo asumido el cargo en febrero. Esta circunstancia retrasó su detención, ya que se abrió una pieza secreta para no alertarle mientras se encontraba fuera de España. Sin embargo, en cuanto pisó suelo español, los agentes encargados de la investigación procedieron a su arresto inmediato.

Tras el levantamiento del secreto de la pieza separada el miércoles 6 de marzo, el juez, tras tomar declaración al guardia civil, decidió impedirle salir de España. Si bien se le investiga por delitos de pertenencia a organización criminal y cohecho, las autoridades descartan, por el momento, el delito de revelación de secretos al resto de la 'trama Koldo'.

No obstante, las nuevas informaciones que han salido a la luz en los últimos días, como la presencia de Víctor de Aldama en Barajas aquella madrugada y la posible relación de Air Europa con Venezuela, abren la puerta a nuevos avances en la investigación, según señalan las fuentes consultadas por El Mundo.

¿Una maniobra para colocar a Villalba en Venezuela?

Además, el puesto recientemente asignado al comandante Villalba en la Embajada de España en Venezuela podría tener una conexión directa con la trama. Según los pinchazos telefónicos realizados en el caso, el propio Koldo García aseguró haber abierto "un par de puertas" al mando de la Guardia Civil, lo que sugiere posibles maniobras para colocarle estratégicamente en ese codiciado destino.

A medida que se descubren más detalles, la complejidad del 'caso Koldo' se vuelve cada vez más intrincada, revelando posibles ramificaciones que trascienden las fronteras españolas y apuntan a una trama de corrupción de proporciones insospechadas.

El enigma de Barajas: Inspección fiscal destapa la conexión de De Aldama con el caso Delcy Rodríguez

Un informe exhaustivo de la Agencia Tributaria (AEAT) ha sacado a la luz la presencia de Víctor de Aldama, conocido comisionista de la trama Koldo, en el Aeropuerto de Barajas durante la controvertida llegada de Delcy Rodríguez, vicepresidenta de Venezuela, el 20 de enero de 2020. La AEAT pone énfasis en la coincidencia de esta fecha con los esfuerzos de De Aldama por recuperar una deuda de 200 millones de euros que el Gobierno de Venezuela mantenía con Air Europa. "Llamamos la atención de la fecha y las conexiones del señor De Aldama con Venezuela", destaca la entidad fiscal.

El informe, firmado el 2 de febrero pasado por la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) y dirigido al Juzgado Central de Instrucción nº 2 de Madrid, detalla las operaciones de la trama Koldo y el papel de Koldo García Izaguirre, funcionario del Ministerio de Transportes y asesor de José Luis Ábalos, en el denominado "negocio de las mascarillas".

El papel de De Aldama, descrito como un consultor "en la sombra" del conglomerado Air Europa, se entrelaza con sus vínculos personales con los Hidalgo, propietarios de la empresa. Su implicación fue crucial en dos asuntos: las negociaciones con el Ministerio de Transportes para el rescate de Air Europa y la gestión para liberar los fondos retenidos por el Gobierno venezolano.

El inspector Raúl Burillo, de la AEAT en Aragón, enfatiza la importancia de estas negociaciones, las cuales, según sus hallazgos, marcan el origen de los sucesos investigados. Aunque hasta septiembre de 2019 no se le conocían actividades destacables, De Aldama firmó un contrato con Globalia/Air Europa para solucionar un apremiante problema de liquidez con Venezuela.

El acercamiento a Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez y directora del Africa Center del IE, se produjo en septiembre de 2019. De Aldama se reunió con ella en San Petersburgo, hecho revelado por El Confidencial. También se sabe que durante los albores de la pandemia, De Aldama ofreció al Ministerio de Transportes vender mascarillas, aprovechando sus conexiones con el sector aéreo y con intermediarios chinos.

El Delcygate y la trama

La presencia de De Aldama en Barajas, en la misma fecha del llamado Delcygate, ha sido resaltada por Hacienda como un hecho sorprendente, pese a la abundante literatura existente sobre García Izaguirre y las maniobras de compra de mascarillas. De Aldama fue contratado en septiembre de 2019 con la misión de cobrar con urgencia la deuda de Venezuela, bajo la presión de un plazo que preferentemente no debía exceder diciembre de ese año.

El aterrizaje inesperado de la vicepresidenta venezolana, sujeta a sanciones de la UE que le prohibían la entrada en suelo comunitario, y el cometido de De Aldama de cobrar la deuda venezolana, convergen en aquel 20 de enero en Barajas. Aparte de Ábalos y García Izaguirre, De Aldama también estuvo allí.

La AEAT revela que la misión encomendada a De Aldama era canjear una cantidad no especificada de bolívares venezolanos, alegadamente acumulados por Air Europa por venta de vuelos, en 200 millones de dólares. "Esto resulta llamativo, por la cifra, por la imposibilidad del cambio en mercados oficiales (salvo blanqueo), pero sobre todo por el hecho de que una compañía como la que comentamos encargue esta gestión a una persona con el perfil del señor De Aldama", señala el informe. En caso de éxito, De Aldama recibiría una compensación de cinco millones de euros.

De Aldama admite el contrato y sus gestiones ante el Gobierno venezolano

, y menciona una posibilidad real que había planteado: cobrar la deuda en Petros, la criptomoneda venezolana. No obstante, las negociaciones no llegaron a buen puerto debido a la negativa del señor Hidalgo de aceptar dicho acuerdo. A pesar de sus esfuerzos, De Aldama sostiene que no ha recibido remuneración alguna por su trabajo.

La conexión con el Delcygate se ve reforzada por conversaciones interceptadas por la Guardia Civil que involucran a De Aldama. Juan Carlos Cueto, financiador de la trama, expresó su preocupación ante un posible interrogatorio a De Aldama por parte de la AEAT: "Le preguntarán por todos, por mí, por Angola, por Ábalos, por el presidente del Gobierno, por la ministra de Defensa, por Delcy, por las maletas... por todo".

Air Europa, por su parte, confirmó el contrato con De Aldama pero negó haberle efectuado pago alguno. La aerolínea proporcionó extensa documentación para demostrar que el cobro de la deuda no se concretó y afirmó que distintos bufetes de abogados continuaron esforzándose por recuperar los fondos a través de la compañía Venezolana de Petróleos.

Una deuda histórica

El presidente de Globalia, Juan José Hidalgo, había denunciado ya en 2014 que Venezuela le impedía repatriar 200 millones de dólares, correspondientes a la venta de boletos aéreos en 2013. A pesar de que el Gobierno venezolano había reducido su deuda con las aerolíneas internacionales en una quinta parte, aún persistía un pasivo cercano a los 3.500 millones de dólares, según la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV).

Las compañías aéreas, afectadas por el control de cambios instaurado en Venezuela desde 2003, enfrentaban obstáculos para convertir en divisas los bolívares obtenidos por la venta de billetes, problema que se agravó a partir de 2012. A pesar de ello, Javier Hidalgo subrayó la ausencia de soluciones efectivas y su intención de continuar operando vuelos hacia Venezuela.

Juan José Hidalgo enfatizó la relevancia de la ruta Madrid-Caracas para Air Europa, empresa que dijo entonces "no va a renunciar a una operación que es importante". Por su lado, Nicolás Maduro sostuvo que su gobierno es un deudor confiable que cumplía con sus compromisos financieros.

La escena en Barajas durante la madrugada del 20 de enero de 2020 adquiere tintes de misterio. Delcy Rodríguez, junto a cinco acompañantes, arribó con 40 maletas que, sin pasar por controles de seguridad, fueron cargadas en un vehículo de la Embajada venezolana y abandonaron el aeropuerto. Testigos presenciales relataron que el vehículo, de matrícula diplomática, permaneció junto a la terminal ejecutiva hasta que Ábalos y Rodríguez finalizaron su encuentro de hora y media.

Las especulaciones sobre el contenido del equipaje no tardaron en surgir. Tanto el Partido Popular como Ana Oramas, diputada de Coalición Canaria, sugirieron que el vuelo de Rodríguez podría estar vinculado a la "ruta del oro" de Venezuela. Oramas mencionó rumores sobre la fundición del oro venezolano en Turquía y la posibilidad de que el avión transportara cajas y lingotes de oro.



Publicar un comentario

0 Comentarios