La Zona Libre de Colón, un imponente emporio comercial que alberga a más de 2.600 empresas y funge como un portal global para el intercambio de mercancías provenientes de más de 90 países, se ha convertido en el blanco de sofisticadas redes criminales transnacionales. Este inquietante fenómeno ha desencadenado un preocupante repunte de la criminalidad en la región, ensombreciendo el vital papel que desempeña esta plataforma comercial en la economía panameña.
Punto crítico para el contrabando de alto valor
Juan Carlos Buitrago, brigadier retirado de la Policía Nacional de Colombia y destacado experto en consultoría de inteligencia de negocios, ha puesto de relieve la alarmante situación que atraviesa Colón, calificándola como un punto neurálgico por el que transitan bienes de contrabando de elevado valor, abarcando desde cigarrillos hasta oro y armas. Esta reveladora información, expuesta en Forbes Colombia, pone de manifiesto la magnitud del desafío al que se enfrenta la Zona Libre de Colón en su lucha contra el comercio ilícito.
Unión de fuerzas contra el crimen organizado
Ante la creciente amenaza del crimen organizado, se ha forjado una sólida alianza entre los sectores público y privado, cristalizada en la creación del Comité de Prevención y Combate al Comercio Ilícito de Cigarrillos (COEPA). Este comité, respaldado por la embajada de Estados Unidos, Interpol y destacadas entidades como Philip Morris International, representa un significativo avance en la colaboración regional, un elemento crucial para hacer frente al contrabando que moviliza sumas astronómicas en América Latina, como los más de 6,000 millones de dólares que fluyen solo en Colombia.
El tráfico de cigarrillos: un indicador alarmante
El tráfico ilícito de cigarrillos se ha erigido como un preocupante barómetro del alcance del crimen organizado, situando a Panamá en el epicentro de una red delictiva que se extiende por toda Latinoamérica. Expertos como Alejo Campos, de Crime Stoppers, enfatizan la imperiosa necesidad de fortalecer las medidas de prevención y regulación para contrarrestar la economía criminal que amenaza con empañar la reputación de Panamá como un actor clave en la logística mundial.
El reto que afronta la Zona Libre de Colón trasciende el mero incremento del comercio; implica también proteger su infraestructura logística de la insidiosa infiltración del mercado negro. Los expertos coinciden en que solo mediante un desarrollo integral que aúne el fortalecimiento del intercambio comercial con robustas medidas de seguridad, será posible salvaguardar la integridad de este vital hub comercial y mantener a raya las sombras del comercio ilícito y el lavado de dinero que acechan en el horizonte.
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